Wednesday, March 11, 2009

Poesia Cristiana

¡Mi papá!

Cuando mi mundo era

el vientre de mamá

,

aunque yo no viera

tú mirabas desde allá

.

Ponías tu mano

para descansar

,

y arrullabas mi sueño

para no llorar

.

En tu almohada dormía

cubierta de paz

y siempre despierto

te encontrabas papá

.

Desde la infancia

me empezó a consolar

tu tierna mirada

y tu forma de amar

que acariciaba mi alma

cuando solía llorar

.

Cuando hambre tenía

no supiste negar

tu amor ni comida

,

Oh! Mi tierno papá

.

Me llevabas en brazos

y aprendí a caminar

,

con amor de tu mano

sostenías mi andar

.

Sobre tus rodillas

me sentaba a escuchar

los consejos que un día

yo tuviera que usar

.

Corregías mis pasos

aunque dolían, ¡Papá

!

Sabía que era

por el buen bienestar

de esta carrera

que lograré terminar

.

Hoy te agradezco

mi dulce papá

por tu amor y cuidados

que derramaste al dar

lo que nadie me ha dado

¡Mi Señor celestial

!

Patricia J. Olivera Costilla.


Promesas

Al recordar tus promesas

tus palabras tan dulces

haces que me sienta

volando entre las nubes.

Promesas que vienen

en el suave suspirar

de esta niña que tiene

sed y hambre de amar.

Amar lo que tú quieres,

que yo ame al caminar

por este mundo, que muere

sin amor y en soledad.

Tus promesas gloriosas

son un fresco manantial

a mi alma que rebosa

de tu paz y tu verdad.

Esa paz que no muere,

cuando oyen pronunciar

mis oídos, ¡Tus Palabras!

que jamás han de pasar.

Patricia J. Olivera Costilla.


Lágrimas del Santo

Al rodar por tus mejillas


Con gran dolor del corazón


Aquellas lágrimas sencillas


Dejaron huellas de pasión


Por el mundo que se pierde


Sin amor, sin compasión

.

Aquellas lágrimas hoy duelen


Viendo al mundo sin perdón


Porque sabes, que si mueren


No gozarán tu salvación

.

Lágrimas del Santo


Que se mezclaron con sudor


Porque amó al mundo tanto


Llevando todo su dolor

.

Lágrimas benditas


Que me acercaron al Señor


Lágrimas con ruegos


De mi amado intercesor

.

Patricia J. Olivera Costilla.


Ni mil poemas darían


Homenaje a tu amor sublime


Ni mil poemas serían


Suficientes para quien me redime

.

Ni mil poemas hablarían


De lo mucho que he recibido


Ni mil poemas pagarían


A mi Cristo por lo vivido

.

Patricia J. Olivera Costilla.


El Nombre de Jesús

El nombre de Jesús


Ha roto mis cadenas


Por su muerte en la cruz


Ha hecho cosas nuevas.

El nombre de Jesús


Renueva con poder


Cubriéndoles de luz


si se atreven a creer.

Patricia J. Olivera Costilla.



La fragancia de tu Presencia

Entre un jardín de flores


Bebí el néctar de tus amores

Me embriagó la fragancia de tu presencia


Que calmó los vacíos de tu ausencia.

Sangraste heridas por mis dolores


Refrescaste mi alma con tus olores

Fragancia divina que da excelencia


Sobrepasa el dinero y toda ciencia.

Patricia J. Olivera Costilla.


Tú eres mi cántico

Tú eres mi cántico


Divino creador


A ti elevo mi voz,


la alabanza y el honor

.

Cántico que trae


Paz en la aflicción


Concierto donde rae


Todo mal del corazón

Apasionas hoy mi alma


Tú mi canto ¡Mi Señor!


Canción que trae calma


A tu fiel adorador

.

Patricia J. Olivera Costilla.



Dulce Oración

Dulce rincón


Que revela tu faz


Hermosa oración


Donde inunda tu Paz

.

Placer matutino


Que embriaga de Dios


Y vuelvo a ser niña


Cuando escucho tu voz

Preciosas noticias


recibo señor,


con tus caricias


Me lleno de amor

.

Me trae el perdón


Envuelve mi ser


Cuan dulce oración


Donde vuelvo a nacer

.

Patricia J. Olivera Costilla.


Quiero ser diferente

Quiero ser diferente


Venir a ti cada día


Lo mejor de mí ofrecerte


Sentir tu voz que me guía...


Con ningún pecado ofenderte


Y ante él no olvidar mi huída,


Para caminar reverente


En todo tiempo y lugar en mi vida

.

Patricia J. Olivera Costilla.



¡Oh Papá lindo

¡Oh Papá lindo!


Cuan grandes son tus moradas


Cuan dulce tu habitación


Me aman tus fuertes brazos


Me llenas el corazón

Traspasas con tus miradas


E inundas de emoción


Mi vida que no fue amada


La vuelves en bendición


Rodeas mi tierno Cristo


Con tus lazos llenos de amor


Y veo lo que no he visto


Para darte gloria y honor

.

Patricia J. Olivera Costilla.


¡Te quiero conocer!

En lo secreto mi Señor


En tu suave intimidad


¡Te quiero conocer!


Y habitar en santidad

Cuan profundo es ¡Oh Dios!


E inescrutable tu pensar


¡Te quiero conocer!


Aunque tenga que esperar.

Patricia J. Olivera Costilla.



Amistad

Amistad

es saber escuchar
Entender sin poder reprochar,
Amistad es saber perdonar
Los defectos dejar de mirar,
Amistad es saber aceptar
Y consejos poder entregar,
Amistad es saber esperar
Y Jesús te quiere enseñar.

Patricia J. Olivera Costilla.



Siervo



Eres tú el escogido


Por el Padre Celestial


Por cuanto le ha placido


A ti su obra encomendar.

No importa cuanto tarde


Dios la obra completar


Que tu alma fiel aguarde


Y no desvíes tu mirar.

Dios te dice : las naciones


En herencia te daré


Y no pide mil canciones


Solo un corazón de fe.

No olvides mi Ministro


Te dice el Señor


Que Yo Soy quien te visto


Y te sustento con amor.

Espera en el Amado


Que el vallado puesto está


Has sembrado y has regado


Pero crecimiento Dios lo da.

Aquel que siembra la Palabra


Con gozo ha de llegar


A la tierra donde labra


Porque fruto ha de segar.

Patricia J. Olivera Costilla.

Que tu fiel Corazón
Le de aliento al mío
Porque tú eres la razón
Por el cual está vivo.

Que tu santo corazón
Se una con el mío
Y durante mi oración
Te sienta como un río.

Tu tierno corazón
Cubrió de amor el mío
Con grande compasión,
Me amó el Ser Divino.

Patricia J. Olivera Costilla.



¡Oh Sumo Sacerdote!

Rasgaste el velo de mi corazón


Siendo tú, Amado mediador


El único invitado de honor


A este humilde y necesitado mesón.

Sólo tú ¡Oh sumo sacerdote!


Presentaste el sacrificio


Que a mi alma libró del juicio


Y a mi cuerpo del azote.

Hoy ante Dios confiadamente


Cada día me presento


Y recibo fiel sustento


Perdón y gracia nuevamente.

Patricia J. Olivera Costilla.


Gracias Mi Amado

Gracias porque:


Rodeas mi vida con tus lazos de amor


Abrazas mi alma quitando el rencor


Corriges mis pasos sin causarme dolor


Amaste mi vida cuando nadie la amó


Estuviste a mi lado cuando mi voz te llamó.

Gracias porque:


Me hiciste ser parte de tu santa nación


Entregaste en mis manos una gran comisión


Unges mi cabeza con tu preciosa unción


Me das cada día tu fiel protección


Prosperas mi vida con tu gran bendición

Gracias porque:


Escuchas atento mi dulce oración


Susurras muy cerca una tierna canción


Me llevas tan lejos donde no hay confusión


Recibo la calma, tu luz y el perdón


Preparas mi alma para recibir galardón.


Por eso y por todo yo siempre te doy


Gracias Mi Amado de todo corazón.

Patricia J. Olivera Costilla.

Engrandece tu Nombre
Oh mi Amado Divino
Para que vean los hombres
Que tu reino ya vino.

Engrandece tu Nombre
Mi Señor de Poder
Para que crea el pobre
Que es de Jehová proveer.

Engrandece tu Nombre
Oh mi Padre de amor
Para que vivan los niños
En ti un futuro mejor.

Engrandece tu Nombre
Jesucristo de Gloria
Y reconozca el hombre
Que en ti está la victoria.

Engrandece tu Nombre
Para yo poseer
Lo que has prometido
Que sin ver ha de ser.

Patricia J. Olivera Costilla.



Canto para ti

Canto para ti


Porque me haces habitar


En un lugar seguro


Donde puedo reposar.



Canto para ti


Porque se que en tu soñar


No olvidas mi Señor


Lo que anhelo realizar.



Canto para ti


Porque se que al escuchar


Cuando clamo en oración


Tu respuesta ha de llegar.

Patricia J. Olivera Costilla.

Estás aquí
Como el viento
Que se mezcla entre mis cabellos

Estás aquí
Como el Sol
Que ilumina los días bellos

Estás aquí
Como la luna
Que alumbra con sus destellos

Estás aquí
Para Grabarme
En el alma todos tus sellos.

Patricia J. Olivera Costilla.



Dulce Aroma

Cuando aún en mi lecho posaba


Tu dulce aroma se paseaba


Acompañado de destellos dejaba


Profunda fragancia que mi alma anhelaba.

Dulce aroma que de mañana instaba


Doblar mis rodillas y ante ti humillada


Logré oír que tu voz me hablaba


Me decía, tú eres mi hija amada.

Dulce aroma que mi memoria grababa


Suave fragancia que tu ser destilaba


Aún en mis sueños tu aroma estaba


Olor permanente que jamás terminaba.

Patricia J. Olivera Costilla.



Tus Manos

Tus manos han llegado
A mi triste soledad
Y para siempre has arrancado
Esa enemiga sin piedad
.

Tus manos han salvado
A esta princesa de escapar
Lejos de su amado
Que la hizo despertar
.

Tus manos han librado
Mi alma de pecar
Y sólo tú me has dado
Razones para amar
.

Tus Manos han Limpiado
Esta oscura suciedad
Y cada llaga tú has borrado
Con tu dulce sanidad
.

Tus manos han formado
Este vaso con amor
Y tu voz ha despojado
La amargura y el rencor
.

Tus manos acarician
Con ternura y compasión
Y tus besos que destilan
Manantiales de ilusión
.

Patricia J. Olivera Costilla.



Las notas de tu amor

Las notas de tu amor


Se unen para dar


Hermosas melodías


Que me hacen reposar.

Las notas de tu amor


Me ayudan a soñar


Recorren mi interior,


Me invitan a cantar.

Patricia J. Olivera Costilla.

Despreciado y desechado entre los hombres,
Experimentado en quebranto, varón de dolores,
Fue herido y molido por nuestros pecados,
Y por su llaga fuimos nosotros curados
.

Habiendo Él orado por sus transgresores
Como oveja fue llevado delante de sus trasquiladores
Por cárcel y por juicio fue enfrentado,
Y de la tierra de los vivientes fue quitado

Aunque no hizo maldad fue maltratado,
Aún por sus amigos fue negado
Por nuestra paz sin compasión fue azotado,
Censurado y de sus vestidos despojado
.

Habiendo entregado su vida en expiación,
Quedará satisfecho al ver el fruto de su aflicción.
Por su conocimiento justificará y dará la redención
,

A muchos que le hirieron,
aún sabiendo que era el salvador.
Nos permite por su sangre, ser libres del rencor,
Del pecado, de la muerte, la amargura y el dolor
.

Patricia J. Olivera Costilla.



El Gran YO SOY

Yo soy el alfa y la omega


Yo soy la vida eterna


Yo soy quien hizo la luz


Yo soy tu amigo Jesús.

Yo soy la vid verdadera


Yo soy la paz de la tierra


Yo soy la fuente de amor


Yo soy tu dulce Señor.

Patricia J. Olivera Costilla.



Me Sedujiste

Me sedujiste ¡Oh Señor!


Cuando pensé todo dejar


Sentí consuelo en mi clamor


Y ardiente fuego en mí quemar.

Me Sedujiste el corazón


La vida entera sin dudar


Me devolviste la razón


Para volver a caminar.

Patricia J. Olivera Costilla.

Aquel día
En que mi sol se apagaba
Sola corría
De lágrimas inundada
En contra de la vía
Sin importarme nada
Gemía y Gemía
Hasta el aire me asfixiaba.

Aquel día
Sin luz ni esperanza
No veía
La muerte que amenaza...
Tú mi guía
Pusiste tu confianza,
Compañía
Y ternura que me enlaza.

Aquel día
Dejó de ser lamento,
Sólo vida
Con Cristo mi sustento,
Sonreía
Libre de tormento,
Como niña
En los brazos del Maestro.

Patricia J. Olivera Costilla.



Un abrazo

Necesito un abrazo


Solo tuyo mi Jesús


Que me esconda en tu regazo


Inundándome de luz.

Necesito un abrazo


Que me hable de tu amor


Y me diga que en tus brazos


Yo me olvido del dolor.

Patricia J. Olivera Costilla.



¿Cómo no?

¿Cómo no sentirte?


Si me has tocado

¿Cómo no amarte?


Si me has amado

¿Cómo no esperarte?


Si hoy me has dado

Promesa triunfante


De tu reinado.

Patricia J. Olivera Costilla.

Tu belleza resplandece
La hermosura en tu mirada,
Ver tu gloria que amanece
Cuando ingreso a tu morada.

Tu belleza incandescente
Es el fuego que derrama
Tus Palabras en mi mente
Y las caricias en mi alma.

Patricia J. Olivera Costilla.



Dedicado a las Madres...

Corazón de Madre

Corazón de madre, valiente y esforzado
Corazón de madre, lo mejor que hemos hallado
Corazón de madre, que en sus hijos ha pensado
Cada día, cada noche, en el presente y el pasado.

Corazón de madre, que de niños disfrutamos
Corazón de madre, que aún del vientre escuchamos
Corazón de madre, que decía YO TE AMO
Aún cuando mil veces me hayas lastimado.

Corazón de madre, tesoro inapreciado
Corazón de madre, que dolores ha olvidado
Corazón de madre, que ha dejado su legado
A sus hijos, a su esposo y a quienes ha enseñado.

Corazón de madre, que levanta los pilares
Corazón de madre, que transforma los lugares
Corazón de madre, que enseña con su ejemplo
Y que perfuma, con sus oraciones en el templo.

Corazón de madre, que me muestra lo sincero
Corazón de madre, con sentimiento verdadero
Corazón de madre, que se humilla por sus hijos
Pero lucha incansable por su amor y por sus dichos.

Corazón de madre, que se atreve a confiar
Corazón de madre, que en Cristo pone su mirar
Corazón de madre, que le habla sin dudar
Al Dios eterno, que su respuesta ha de enviar.

(Mayo 11, 2007) Patricia J. Olivera Costilla.


Mamá Linda

Desde el vientre me cuidaste,
En tus brazos me arrullaste,
Con tu voz me consolaste
Y mi llanto tú calmaste.

Todo el tiempo me enseñaste
A ser la hija que esperaste
Como madre te esforzaste
Y como niña tú jugaste.

Por eso Mamá linda
Hoy anhelo expresarte
Que quien me dio la vida
Tiene regalos para darte
Y día a día Él te cuida
Sin olvidar recompensarte.

(Mayo 11, 2007) Patricia J. Olivera Costilla.


No comments:

Post a Comment